Literalmente si quieres visitar Capri te deja sin aliento, no sólo por las vistas, sino porque "decidir" recorrerla a pie en pleno verano es un poco locura pues todos los caminos son bastante empinadillos sobre todo a la hora de bajar a cualquier cala.

Pero empiezo por el principio, el día anterior a nuestra salida a Capri, nuestro anfitriones italianos nos llevaron a un restaurante en la zona de Nocera Inferiore, muy cerca de Napoles, la verdad que se comia de lujo, hasta 5 platos diferentes y todo buenisimo, un vino tinto "frío" y grappa... Esa noche fiesta, con lo que al día siguiente habiamos decidido pasar a la isla pero queríamos aprovechar bien el día con lo que dormimos unas 2 horas, el cansancio acumulado se notaba, pero quedarnos en Salerno no era opción, teniamos 20 minutos desde el hotel hasta el embarcadero para tomar el ferry a las 8 y el trayecto es una media hora.

Ya en Capri lo primero que vez son agencias que te llevan a hacer la ruta de la isla por el mar, desde Marina Grande, y el funicular. Pero pensamos vamos a por agua y ver que se puede hacer en la isla en la zona de información ir por un mapa, pero "oh sorpresa" Que nos hemos dejado las tarjetas, así que sólo llevabamos entre las dos unos 25 euros o tal vez 30 con las monedas para pasar el día, ya ni pensar en hacer noche. Por lo menos el billete de vuelta era abierto.

Recorrer Capri y la zona de AnaCapri en un día es imposible, es más sencilla y con unas vistas increibles la zona de Capri, tomas el funicular, en la oficina de información te cobran por el mapa, así que sin mapa, nos lanzamos a caminar hasta lo más alto de la zona (Monte Solaro) se puede llegar en telesilla, te vuelves loca con las vistas y las casas son de revista, no me quiero imaginar vivir allí porque es empinadisimo. Entramos a alguna casa y comimos una pizza en un pequeño restaurante por 9 euros, tienes fuentes de agua fresca con lo que rellenar el botellin de agua.

Bajamos a alguna cala, pero por lo que vimos nos gusto muy poco, parecen playas privadas no puedes poner una toalla y tienes que pagar tumbona. Llegamos a una cala que era gratis pero estaba petada de peña... Ponias un alfiler y seguro que pinchabas a alguien. Marina Piccola

Al final comimos, tomamos un bus, el funicular y hasta nos llego para comprar el tipico Limonchelo de la isla (El formato pequeño)... Me quedé con la pena de no recorrerla por mar, pero tengo una amiga que vive allí, así que regresaré!

Os dejo fotos... Que esas no tienen precio!

Publicado hace 13 años en Viajar por Europa > Italia