Me gusta la ciudad porque no es grande pero es un buen destino para pasar un fin de semana agradable. Visitamos la Catedral, las casas colgadas y el Puente de San Pablo, claro, que es parada obligada. Nos alojamos en el NH Ciudad de Cuenca y comimos en el restaurante El Coto de San Juan, del que recomiendo sus arroces. Puede que alguien no sepa que con la visita a las casas se puede entrar en el Museo de Arte Abstracto, con una colección variada de la que destacaría los grabados de Goya. A la hora del atardecer es cuando más bonitas están!

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