Nos fuimos de fin de semana a esta maravilla del mundo en Austria, creo que es uno de esos lugares que no habría que perderse nadie en la vida. Está entre las montañas de Salzkammergut, cerca del lago Hallstätter, antiguamente no se podía acceder a este lugar a no ser de que fueras en barco o por senderos estrechos, hoy, claro está, hay una carretera. Algunos de los lugares de los que pudimos visitar en este lugar fue la Mina de Sal, la más antigua del mundo, la Plaza Principal, la Iglesia Parroquial Católica, el Osario Hallstätter Beinhaus( esto va de unos mil y pico de cráneos adornados ) la Torre de Rudolf, desde aquí pudimos ver gran parte de Hallstätt, y por supuesto el Lago Hallstättersee con las cascadas Waldbachstrub. Es precioso, cuando llegamos al pueblo y vimos las casas pegadas al lago con sus balcones repletos de flores, se reflejaban en el lago, fue alucinante. Es sin lugar a dudas, el destino ideal para perderse unos días y estar en contacto directo con la naturaleza y disfrutando de la exquisita cocina que tienen los austriacos.

Publicado hace 13 años en Viajar por Europa > Europa Central